1 de julio de 2010

The Hurt Locker, La Guerra es una Droga

Kathryn Bigelow (K-19 The Widowmaker) regresa con un película aclamada por la crítica como una de las mejores del 2009 y con nueve nominaciones al premio de la Academia. Partiendo del guión de Mark Boal, quien fuera periodista de guerra en Irak, Bigelow nos entrega una profunda reflexión sobre la guerra, ya que Zona de Miedo no es un filme bélico más. La directora nos adentra en la historia con un acertado prólogo: “El ímpetu de batalla es una potente y muy a menudo letal adicción, pues la Guerra es una droga”.

Corre el año de 2004 en Irak y el sargento William James (Renner) toma el lugar del recién fallecido Matt Thompson (Pierce), como ingeniero encargado de la desactivación de bombas a 39 días del reemplazo de la compañía Bravo. Los excéntricos métodos de James, provocan controversia entre sus compañeros de equipo: JT Sanborn (Mackie) y Owen Eldridge (Camargo). En los días subsecuentes, varios sucesos como, el entablar amistad con un niño irakí y el frente a frente con un hombre bomba, ocasionan un cambio en la manera de percibir la vida del sargento, quien tiene una esposa y un hijo en casa.

La cinta es emocionante de principio a fin. Utilizando el recurso de las cámaras S16mm; zooms agresivos y slow motions en momentos claves, recrean un ambiente de suspenso que nos transmite la desesperación y nerviosismo de los hombres en combate. De igual manera, la composición musical y la mezcla de sonido, son impecables, por lo que técnicamente, Zona de Miedo resulta un producto perfecto.

Recordando largometrajes como Cara de Guerra y Apocalipsis Ahora, ésta obra retrata la obsesión por el combate y la manera en que el hombre se sumerge en él, al punto de volverse adicto y no poder sobrevivir sin la adrenalina que éste transmite. Más allá de justificar la ocupación en Irak, Bigelow critica este hecho inteligentemente con una premisa muy clara: “¿Por qué pelean nuestros hombres?”.

Con un presupuesto de 11 millones de dólares, la directora deja en claro que para crear acción y emoción, no es necesario gastar demasiado, si no saber hacer un buen uso de los recursos. Como reconocimiento a su gran labor, fue condecorada con el premio a mejor trabajo de dirección por parte del Directors Guild of America (DGA). Las apuestas siguen sobre James Cameron (ex esposo de Bigelow) y Avatar. Pero Kathryn y su película, podrían llevarse con suma justicia cualquiera de las estatuillas en los departamentos creativos y técnicos.

2 comentarios:

  1. hoolas soy daiana.. meparece que la guerra es una bludes... basta con la guerra.. necesitamos paz.. es lo unico q queremos..

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  2. como decía John Lennon "Give Peace a Chance". Todos (o casi todos) queremos la paz, aunque desgraciadamente parece ser algo utópico hoy en día. Con esta entrada resalto el valor estético de la película, no es para nada una de mis favoritas ni su mensaje es muy pacifista, pero a pesar de que a mi parecer no merecía el Oscar, es una película muy bien lograda tecnicamente

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